“Nosotros no vamos a donde las cosas están resueltas, sino a donde más nos necesitan”, dijo como frase de bienvenida la profesora Adle Hernández, directora de Proyección y Relaciones Comunitarias de la Extensión Social de la UCAB, al nuevo contingente de estudiantes incorporados al Voluntariado de esta universidad.

El miércoles 16 de octubre, le tocó el turno para recibir su inducción al segundo grupo más numeroso, después de los voluntarios de la Escuela de Economía, como es el de estudiantes de la Escuela de Derecho.

El Voluntariado, como su nombre lo indica, acoge a los estudiantes de todas las escuelas de la UCAB que desean incorporarse a las distintas actividades de Extensión Social sin recibir a cambio calificaciones o cumplir algún requisito académico. A través de la Extensión Social también se gestionan las cátedras de compromiso social y el servicio comunitario que sí son actividades de obligatorio cumplimiento, aunque estén también vinculadas a actividades de labor social.
Para organizar de mejor manera las agrupaciones que hacían voluntariado en la universidad, se creó en 1987 la Dirección de Proyección a la Comunidad. En 2014 la UCAB creó el Reglamento de Extensión Social Universitaria, el cual establece como prioridad la interacción entre los estudiantes y la comunidad para contribuir al desarrollo del país. La Extensión Social UCAB opera en el Parque Social “Padre Manuel Aguirre, s.j.”, al frente del campus de Montalbán.

La Feria de Agrupaciones de la UCAB de este 2019, que reunió a más de 30 agrupaciones que gestionan las actividades extracurriculares, resultó muy exitosa, a juzgar por el número de voluntarios que se ofrecieron para las actividades de Proyección y Relaciones Comunitarias.

La tercera semana de octubre se procede a cumplir con la inducción de los nuevos grupos, con la ayuda de los estudiantes que tienen experiencia –algunos activos durante siete semestres–, que servirán de guías para los recién incorporados.


Hernández dijo a los muchachos –algunos de apenas 16 años– que las escuelas y liceos de las zonas aledañas al campus de Montalbán, como La Vega y Antímano, donde se realizan las actividades, valoran muchísimo el apoyo recibido por los ucabistas.

Maritza Catanho, coordinadora estudiantil del Voluntariado UCAB, destacó que las experiencias que compartirán ayudarán a los estudiantes ucabistas a fortalecerse como profesionales y como personas sensibilizadas con la realidad social nacional.

El grupo de Derecho lo integran una treintena de jóvenes a quienes se les adelantó en qué consiste el nuevo proyecto de simulación, “Si yo fuera diputado”, que forma parte del programa de cultura democrática, que ya desarrolló el módulo “Si yo fuera abogado”. El nuevo proyecto persigue familiarizar a los muchachos de bachillerato con el proceso de formación de las leyes y crear, a partir de una situación real de sus comunidades, un proyecto de resolución de problema a partir de la elaboración de alguna norma jurídica.

Adle Hernández y Maritza Catanho dan la bienvenida al grupo de Derecho.

La idea de este programa también es reconciliar a los estudiantes de bachillerato de una institución de La Vega con la existencia del estado de derecho y que sepan diferenciar que la circunstancia que vive Venezuela actualmente, en materia jurídica y legislativa, no es normal.
El Voluntariado UCAB es casi tan antiguo como la misma institución, pues fue en 1954 cuando, por iniciativa del padre José María Velaz, estudiantes de la Universidad Católica Andrés Bello iniciaron actividades de servicio comunitario, que fue la simiente para la creación, al año siguiente de Fe y Alegría. Está conformado por distintas agrupaciones de estudiantes y profesores que contribuyen con actividades recreativas, deportivas, culturales, pedagógicas, de refuerzo escolar, promoción de valores, formación ciudadana y derechos humano.

 

Textos: Elvia Gómez / Fotos: Manuel Sardá